En estas fechas, algunos inversores exprimen al máximo el “rally alcista navideño” (aunque parece más una tradición, como puede ser la carrera de San Silvestre, que una evidencia empírica). Otros, en cambio, se aferran a la famosa frase “sell in may and go away” (vender en mayo y cerrar operaciones).
Aquellos inversores que verdaderamente se esfuerzan al máximo por “ganarle el pulso al mercado”, dejan a un lado estas creencias populares y se sumergen de lleno en el mundo del análisis, teniendo en cuenta el máximo número posible de variables relevantes para minimizar el error de predicción.
Basándonos en el último punto, estos son los productos financieros en los que invertir en 2016 puede ser una buena opción:
1. El dólar
Como seguramente sabréis, el euro/dólar sigue con tendencia bajista. Mientras algunos inversores miran hacia otro lado y no cesan en su empeño de “vender un euro fuerte”, la realidad es que la paridad está a la vuelta de la esquina, y no sólo eso, sino que puede que la tendencia se revierta en 2016 y el dólar vuelva a consolidarse como principal divisa.
«Según un reciente anuncio por parte de Yanet Jellen, presidenta de la FED, la subida de tipos de interés en EEUU, al 0,5% abre un nuevo ciclo en la política monetaria estadounidense, tras diez años sin subidas.
La subida de tipos, tendrá importantes consecuencias, puesto que los inversores verán ahora al dólar como una divisa “atractiva” a la hora de invertir, incrementando las órdenes de compra y produciéndose, en último lugar, una apreciación respecto al euro.
2. Renta variable europea
La recuperación económica puede comenzar a consolidarse (por fin) en Europa. Los brotes verdes empiezan a emerger, pero debemos estar alerta.
Siguiendo con el símil, la economía, al igual que una planta que acaba de brotar, necesita de muchos cuidados y atención (abonos, riego y luz solar frente a creación de empleo, estabilidad de precios y confianza en los mercados financieros), si cualquiera de las variables falla, o simplemente no cumple nuestras expectativas, la recuperación se puede marchitar.
De seguir todo según lo previsto, diversos analistas apuntan a que las ganancias en renta variable en Europa pueden situarse en un 10% anual frente al 6,8% de Estados Unidos.
3. Asistencia Sanitaria
El sector de la asistencia sanitaria (Healthcare), principalmente empresas farmacéuticas y oftalmológicas, presenta un gran potencial en una estrategia de inversión a largo plazo.
¿Por qué?
Debido al cambio demográfico y el envejecimiento de la población, la asistencia sanitaria es un mercado que se enfrenta a un incremento de su demanda potencial, lo que se traduce en mayores ingresos.
Puedes optar por empresas consolidadas como Bayer e incluir algunas de las farmacéuticas españolas en tu cartera de inversión como Grifols, Almirall, Zeltia, Rovi y Faes Farma.
También, puedes valorar invertir en alguna innovadora start up del sector que consideres que tenga un gran proyecto de futuro. (Esta segunda opción entraña más riesgo).
4. Tecnología
¿Coches que incorporan conducción autónoma? Sorprendente pero cierto. Ya hemos visto a compañías como Google, poner en circulación sus primeros prototipos.
Parece que se acerca otra ola de innovación con inventos revolucionarios. Gafas de realidad virtual, nano robots, vehículos autónomos y, quién sabe qué más. Te recomendamos que sigas de cerca cada uno de los avances de las principales compañías tecnológicas, pero también de las nuevas empresas del sector.
Un invento innovador se traduce en fuertes subidas en bolsa, aunque no debes olvidar que si toda la inversión de la compañía en I+D+i tiene como resultado un producto que el consumidor no demanda, los inversores no tendrán piedad y sus títulos se desplomarán en los mercados bursátiles.
5. Depósito Facto
Todo lo dicho anteriormente, todo el análisis previo, queda muy bien sobre el papel. Sin embargo, en el momento en que hablamos de renta variable, asumimos un riesgo.
Si no quieres que un cambio de variable haga que tus inversiones desaparezcan por arte de magia, puedes destinar tu dinero a la renta fija.
En este aspecto, el Depósito Facto se presenta como una excelente opción para el nuevo año. Puedes constituir tus imposiciones eligiendo el día exacto de vencimiento de las mismas, con una inversión desde los 10.000 euros hasta 3.000.000 de euros.
A cambio, obtendrás una rentabilidad de hasta el 1,50% TAE*. Nada despreciable, ¿verdad?
Y tú, ¿tienes pensado iniciar una inversión en 2016? Si es así, ¿qué opciones valoras?
*TAE del 0,30% (0,30% TIN) para un depósito a 3 meses, TAE del 1,25% (1,25% TIN) para un depósito a 12 meses y TAE del 1,50% (1,50% TIN) para un depósito a 60 meses. A partir de 10.000€ y con liquidación cada 3 meses. Oferta para particulares.
