El hecho de tener una vivienda en propiedad implica tener que hacer frente al pago de ciertos gastos que van más allá de la hipoteca. No te olvides que también tendrás que abonar impuestos derivados tanto del uso habitual de este inmueble (esté o no esté habitado) como de su adquisición (en el caso de que acabes de adquirirlo). Si estás en el caso contrario, es decir; si eres tú quien vende un inmueble, debes saber que tampoco estarás exento de pagar tasas, ya que tendrás que abonar la correspondiente plusvalía.
Si tienes dudas o quieres más información sobre las tasas e impuestos a pagar derivados de una vivienda, en el siguiente post queremos facilitarte la tarea. Sigue leyendo y encontrarás lo que necesitas para saber todo lo relativo a la fiscalidad de los inmuebles tanto si vendes como compras una propiedad, por tu interés.
Como propietario de una vivienda pueden darse diferentes situaciones, y precisamente en función de esas situaciones deberás hacerte cargo de unos u otros impuestos.
A continuación, veremos en profundidad cada una de ellas:
Si ya eres propietario de una vivienda
Impuesto sobre bienes inmuebles
Es el impuesto que comúnmente conocemos como IBI y que grava la propiedad de la vivienda. Se regula teniendo en cuenta el valor catastral que haya fijado el Ministerio de Hacienda (en función del valor del suelo y de la construcción) y de su gestión va a encargarse el ayuntamiento correspondiente. Su pago se realiza de forma anual.
Tasa de basuras
El pago de esta tasa se destina a sufragar el servicio de recogida de basuras de los ayuntamientos y, al igual que el anterior impuesto, su pago se realiza de forma anual y su gestión también corre por cuenta de cada ayuntamiento.
Tasa de agua (solo en algunos ayuntamientos)
Al pagar el importe de esta tasa se tiene derecho a agua potable, aunque como hemos señalado dicha tasa solo se paga en algunos ayuntamientos.
Si acabas de comprar una vivienda
Si estás decidido a comprar una vivienda, estos son los impuestos que tendrás que pagar dependiendo de si se trata de una casa de nueva construcción o de segunda mano.
Si la vivienda es de segunda mano
- Impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP)
El importe de dicho impuesto dependerá de la Comunidad Autónoma en la que se encuentre la vivienda, aunque generalmente está entre el 6 y el 10% del valor del inmueble. De todos modos, infórmate bien antes de realizar el pago porque suele haber descuentos para algunos colectivos (miembros de familia numerosa, personas con alguna minusvalía…).
Si la vivienda es de nueva construcción
- Impuesto de actos jurídicos documentados
Su coste dependiendo de la fecha de compra oscilará entre el 1% y el 1,5% del valor de la vivienda. En el caso de las viviendas de protección oficial ese porcentaje es del 0,1%.
El importe de este impuesto se calcula sobre el valor de la escritura del inmueble y se paga al realizar la compra.
En viviendas protegidas, el IVA es del 4% y un 10% para las de régimen general.
Si vendes una vivienda
- Impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana (IIVTNU)
Esto es lo que comúnmente conocemos como plusvalía. Su importe se calcula teniendo en cuenta el valor del terreno en el momento en el que se lleva a cabo la operación y teniendo en cuenta los años que el dueño ha sido propietario y para lo que se establece un límite de 20 años.
Generalmente si no se acuerda algo diferente, la persona que vende la vivienda es la que paga este impuesto al ayuntamiento correspondiente.
- Gastos de notaría y registro
Variarán según la tasación de la vivienda, de si se ha pedido algún préstamo al banco, etc.
- Cancelación o subrogación de la hipoteca
Algo que previamente habrá que acordar con el propietario para procurar que la vivienda esté libre de cargas.
Estos son, en líneas generales, los impuestos asociados a una vivienda y los impuestos que tendrás que pagar dependiendo de cuál sea tu situación. Pero no olvides que siempre es conveniente consultar en el organismo indicado todas las cuestiones referentes a dichos impuestos o cualquier duda que se te presente, para estar seguro siempre antes de realizar cualquier pago.