¿Cómo desconectar del trabajo en vacaciones? 6 trucos infalibles

¿Por qué es importante desconectar del trabajo durante las vacaciones?

Los descansos vacacionales son necesarios y beneficiosos tanto para los trabajadores como para las empresas. Unas vacaciones bien aprovechadas deben permitir al empleado una desconexión total de sus rutinas y tareas diarias. De esta manera, se puede llegar a un estado de relajación que nos permita volver a cargarnos de energía y ser más productivos en nuestra reincorporación al trabajo. Un buen descanso contribuye también a reducir el estrés acumulado en nuestras rutinas laborales, lo que beneficia a nuestra salud y a nuestra efectividad como trabajadores. Esto nos permitirá prevenir situaciones de estrés extremo que pueden derivar en situaciones negativas para la empresa y, sobre todo, para la salud del trabajador.

Pero desconectar de las rutinas siempre es complicado y a veces la presión de la responsabilidad puede jugarnos una mala pasada a la hora de dejar el trabajo a un lado. Si este es nuestro caso, nada mejor que seguir una serie de pautas bien definidas para lograr desconectar de nuestra vida laboral.

¿Cómo desconectar del trabajo durante las vacaciones?

1. Dejar todo cerrado en el trabajo antes de irnos de vacaciones

Para poder desconectar durante el período vacacional es imprescindible que dejemos nuestros asuntos laborales bien cerrados con antelación, terminando todas las tareas que nos sea posible. Es importante coordinarse con los compañeros de trabajo para que puedan ocuparse de los temas que queden pendientes durante nuestra ausencia. También debemos avisar con tiempo a las personas con las que trabajamos de que vamos a estar ausentes de forma temporal: clientes, proveedores, compañeros, jefes. En este sentido, resulta muy útil programar una respuesta automática en nuestro servidor de email, indicando el contacto del compañero que se ocupará de estos temas durante nuestras vacaciones.

Uno de los problemas que nos han traído los avances tecnológicos más recientes en materia de telecomunicaciones es que hoy en día es posible llevarnos la oficina a cuestas. Es por ello, que desconectar del trabajo debe ser un acto meditado. Debemos controlar y reducir en la medida de lo posible el uso de dispositivos digitales y de Internet durante nuestras vacaciones. Más aún si es para temas laborales. Es importante que facilitemos a nuestra empresa una forma de contactarnos durante las vacaciones, pero este contacto debe darse solo en casos de emergencia. Evitar las pantallas y “volver” al mundo real nos ayudará a descansar.

2. Alejarnos del móvil

Uno de los problemas que nos han traído los avances tecnológicos más recientes en materia de telecomunicaciones es que hoy en día es posible llevarnos la oficina a cuestas. Es por ello, que desconectar del trabajo debe ser un acto meditado. Debemos controlar y reducir en la medida de lo posible el uso de dispositivos digitales y de Internet durante nuestras vacaciones. Más aún si es para temas laborales. Es importante que facilitemos a nuestra empresa una forma de contactarnos durante las vacaciones, pero este contacto debe darse solo en casos de emergencia. Evitar las pantallas y “volver” al mundo real nos ayudará a descansar.

3. Concienciarnos de los beneficios de las vacaciones

Es muy común experimentar un cierto sentimiento de culpabilidad durante nuestras vacaciones. Esto puede impedirnos la desconexión con el trabajo, incrementando nuestro nivel de estrés. Para evitarlo, debemos ser conscientes de los beneficios que las vacaciones tienen para nosotros y para nuestra empresa. A esto puede ayudarnos también el hacer balance de los logros profesionales acometidos durante el año. Así, tendremos en mente que nos hemos ganado estas  vacaciones, sustituyendo el sentimiento de culpa por un sentimiento de satisfacción.

4. Evitar llevarnos trabajo a casa

Es muy importante que sepamos diferenciar los espacios de trabajo y de descanso, evitando llevarnos trabajo a casa durante nuestras vacaciones. Si no dejamos de trabajar, difícilmente podremos desconectar del trabajo. Cambiar de entorno físico y de hábitos durante nuestras vacaciones nos ayudará a realizar también el cambio en nuestra cabeza, a salir del “modo trabajo”. Por ello, las vacaciones son la excusa perfecta para viajar, ir al campo, a la playa, etc.

5. Dedicar tiempo al cuidado personal

Es muy útil pensar en nuestras vacaciones como un tiempo dedicado hacernos una “puesta a punto”, como cuando llevamos el coche al taller antes de un viaje importante. Durante este período vacacional tenemos que intentar cuidarnos a todos los niveles: descansar adecuadamente, comer sano, hacer ejercicio físico, relajarnos en un spa, darnos un masaje. Todas estas actividades nos ayudarán a descansar nuestro cuerpo y nuestra mente, lo que nos permitirá cargarnos de energías. Una de las actividades más sencillas que podemos hacer para eliminar estrés es caminar al aire libre, algo que avala un estudio conjunto elaborado por la Universidad de Michigan y la Universidad Edge Hill.

6. Cultivar nuestras aficiones

Las vacaciones son un momento perfecto para disfrutar de nuestros hobbies y aficiones. Escuchar música, leer, ir al cine, pintar, hacer manualidades… Es muy positivo que dediquemos un tiempo a identificar aquellas actividades cuya práctica nos hace realmente felices, las que ocupan el 100 % de nuestra mente mientras las hacemos y evitan que pensemos en otras cosas. Estas aficiones nos permitirán descansar la cabeza de las rutinas laborales, manteniendo a raya el estrés y permitiéndonos descansar.

Con estas pautas a la vista será más fácil para nosotros disfrutar de las vacaciones, logrando desconectar del trabajo. Así seremos capaces de renovar nuestras energías y de ser mucho más eficientes a la vuelta. 6 sencillos pasos para sentirnos más descansados y felices durante nuestras merecidas vacaciones.