Es posible que muchos de nosotros tuviéramos el primer contacto con la inteligencia artificial (IA) a través de las películas. Pero lo cierto es que ya hace tiempo que ha pasado de ser ficción para convertirse en una realidad y cada vez está más presente en muchos ámbitos de nuestras vidas, aunque no seamos conscientes. De hecho, quizás a muchos nos sorprenderá saber que la primera vez que se utilizó el término ‘inteligencia artificial’ fue en 1956 -en una reunión de científicos en EE.UU- cuando la mayoría de los ciudadanos del mundo ni siquiera soñaban con tener un ordenador en casa y muchísimo antes de que se rodara la famosísima película Blade Runner, que trata sobre este avance científico. Desde entonces esta tecnología -una rama de la informática que se centra en las áreas cognitivas para conseguir que los programas de software sean capaces de razonar y aprender- ha evolucionado muchísimo, a un ritmo exponencial, y esa velocidad se incrementará en los próximos años para hacernos la vida más cómoda.
Veamos cuáles son las tendencias de la inteligencia artificial en 2018 en varios sectores.
Los robots que te hablan por el chat
Son muchas las compañías -e incluso gobiernos- que se han dado cuenta de la importancia de esta ciencia para el futuro y están invirtiendo muchísimo en proyectos de IA. Uno de los usos consiste en conseguir una relación más directa con los clientes. Es el caso de los chatbots, robots que pueden tener conversaciones con personas a través de la mensajería online, es decir, de la atención al cliente, cuando este tiene dudas acerca de un producto o un servicio.
Un coach con IA para entrenar a los trabajadores
También se usa ya para mejorar el trabajo de las personas en ese mismo sector de la atención al cliente. Se graban las llamadas y la IA les enseña a los trabajadores cómo comunicarse mejor y ser más eficientes.
En almacenes
El ejemplo claro es Amazon, o por lo menos el más conocido. Que ya ha empezado a usar robots para mejorar su logística en sus almacenes y centros de distribución. Estas máquinas -capaces de aprender- encuentran y transportan los paquetes que se les pidan. Amazon ha empezado a utilizar también robots para las entregas. Todo eso se incrementará en los próximos años, con máquinas que pueden trabajar todos los días de la semana y a todas horas, incluso sin luz.
Pasar de texto a vídeo
Es, además, una nueva manera de crear contenidos de forma automática. Las herramientas que más están sonando este año son Wibbitz y Wochit. Lo que hacen estos programas de IA es extraer información de un texto y convertirlo en pocos minutos y de manera automática en un vídeo gracias a bancos de imágenes y vídeos como Getty Images o agencias de prensa. Lo utilizan gigantes de los medios de comunicación como Hearst, Time Inc. o The Huffington Post, entre otros.
Dejarse llevar
Ya hemos empezado a oír cosas sobre los coches que se conducen solos. La compañía más famosa es Tesla, porque fue una de las primeras en explorar este campo de la IA, pero eso se va extendiendo y lo hará con más velocidad en los próximos años. De momento, Audi ya tiene también sus modelos, el Aicon y el Audi A7 Sportback. Este último, en 2018, se lo han dejado probar a algunos de sus clientes por las calles de Alemania para que vean cómo es viajar en un coche autónomo.
Dispositivos inteligentes para nuestras casas
El Internet de las Cosas -IT por sus siglas en inglés- empieza a ser ya muy conocido y cada vez más usado. Lo bueno es que se puede combinar con la IA para que nuestra comodidad aumente todavía más. Por ejemplo, ya se puede regular la temperatura de tu casa sin estar en ella, a través de aplicaciones, pero ahora, gracias a la IA, también hay aparatos que aprenden las preferencias de cada usuario y ponen la temperatura a su gusto sin que ellos se tengan que preocupar, adaptándose también a sus horarios de trabajo para consumir menos energía.
Están también las versiones avanzadas del conocido robot que te limpia la casa, que va asimilando la estructura de tu vivienda para adaptarse mejor a las superficies y a los nuevos objetos y ser más eficientes con la limpieza.
Encontrar la cura de algunas enfermedades
Algunas compañías del sector de la salud ya están apostando fuerte por la inteligencia artificial porque puede ayudar mucho. Se está usando, por ejemplo, para investigar y desarrollar métodos más eficientes de diagnosis y nuevos tratamientos para muchas enfermedades, como las cancerígenas, gracias a sistemas que trabajan en red recopilando y analizando muchísima información y aprendiendo de ella. Eso también permite mejorar las predicciones, es decir, saber si un paciente va a desarrollar una determinada enfermedad -incluyendo las psicológicas- estudiando su historial médico, su comportamiento y sus características físicas, y añadiendo también la información que recogen algunas apps médicas cada vez más potentes que podemos utilizar todos con el móvil.
Así que está claro que la inteligencia artificial está avanzando a pasos de gigante y en poco tiempo todos estaremos familiarizados con ella, porque la utilizaremos con normalidad en nuestro día a día.