Puede que con la llegada del nuevo año te estés planteando qué hacer con el dinero que has conseguido ahorrar durante 2017. Invertir siempre es una opción muy recomendable para no tener parados nuestros ahorros. De esta manera, conseguiremos una rentabilidad extra que podremos utilizar más adelante para permitirnos algún capricho, o simplemente incrementar nuestro capital.
Si estás pensando en invertir tu capital, a continuación te planteamos una serie de preguntas que deberás responder antes de tomar cualquier decisión financiera.
1. ¿De cuánto dinero dispones?
Antes de realizar cualquier tipo de inversión, debemos considerar si el dinero que vamos a destinar a este objetivo es realmente un excedente para nosotros, o por el contrario es un capital que podemos llegar a necesitar para cubrir los gastos del día a día. Si tu caso es este último, deberás saber que siempre es conveniente tener un porcentaje de tus ahorros destinado a cubrir cualquier emergencia inesperada que pueda surgir.
Una vez resuelto este planteamiento, debemos delimitar la cantidad exacta de capital que vamos destinar a la inversión y no sobrepasar el límite fijado, ya que esa cantidad condicionará el resto de las decisiones de inversión que tendremos que tomar a continuación.
2. ¿Cuánto riesgo estás dispuesto a asumir?
A partir de la respuesta a esta cuestión definiremos el tipo de inversión que vamos a realizar. Como sabemos, el riesgo de los productos bancarios y su rentabilidad es directamente proporcional, Es decir, cuanto mayor sea la rentabilidad que buscamos conseguir al invertir nuestro capital, mayor será el riesgo que debemos asumir por nuestra parte y viceversa.
En este sentido, si asumimos un riesgo alto y la inversión funciona, obtendremos una gran rentabilidad por el capital invertido. Sin embargo, si la inversión sale mal podríamos perder todo nuestro dinero y aquí es cuando entra en juego la seguridad y la presión financiera que estamos dispuestos a soportar.
Algunos inversores prefieren combinar seguridad y tranquilidad con una rentabilidad atractiva como la que ofrecen algunos productos de inversión tradicionales como los depósitos.
Si tu perfil es éste que acabamos de mencionar, el Depósito Facto te da la oportunidad de invertir tu dinero con el nivel de riesgo mínimo y obteniendo una buena rentabilidad por tus ahorros.
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*TAE del 0,25% (0,25% TIN) para un depósito a 3 meses, TAE del 1,15% (1,15% TIN) para un depósito a 12 meses y TAE del 1,66% (1,65% TIN) para un depósito a 60 meses. A partir de 10.000€ y con liquidación cada 90 días. Oferta para particulares.
3. ¿Cuándo quieres disponer del dinero?
Esta tercera variable también va unida al riesgo que podemos asumir, pues debemos tener en cuenta que en las inversiones de máximo riesgo siempre existe la posibilidad de no ganar nada e incluso de perder el total del capital invertido.
En el caso de productos más seguros como los depósitos, la rentabilidad suele aumentar a medida que lo hace el periodo de vencimiento de este producto. Es decir, que los depósitos a largo plazo suelen ofrecer una mayor remuneración que los que se constituyen a un plazo inferior.
Por tanto, debemos plantearnos si vamos necesitar recuperar la inversión a corto plazo o por el contrario tenemos un margen de tiempo mayor.
4. ¿En qué debes invertir?
Si tu perfil de riesgo es moderado o arriesgado y esperas obtener beneficios tempranos, debes tener en cuenta la opción de diversificar tu cartera e invertir en diferentes productos con distintos niveles de riesgo. Esta estrategia de inversión es la que recomiendan muchos expertos financieros que buscan minimizar riesgos.
A la hora de destinar nuestro capital, existen numerosas opciones que debemos contemplar para no limitarnos a la típica y arriesgada inversión en acciones de bolsa. Así, además de los productos financieros ya mencionados anteriormente en este artículo, siempre podemos considerar la posibilidad de invertir en otros mercados y sectores como el mercado inmobiliario, los metales preciosos o los negocios emergentes.
En cualquier caso, es necesario que siempre hagamos un exhaustivo estudio previo antes de tomar cualquier decisión, ya que en este tipo de inversiones el retorno de nuestro capital nunca es 100% seguro.
5. ¿Conoces la fiscalidad de tus inversiones?
Es importante que antes de elegir un tipo de inversión u otra nos informemos de la fiscalidad del producto al que vamos a destinar nuestros ahorros.
Cada inversión financiera tiene asociada una fiscalidad concreta y normalmente tributaremos en la declaración de la renta por los beneficios obtenidos de nuestras inversiones.
Asimismo, hay algunos productos financieros que tienen algunas particularidades y permiten la desgravación fiscal, como es el caso de los planes de pensiones.
6. ¿Tienes suficientes conocimientos financieros?
Muchas veces, los ciudadanos de a pie no disponemos de los suficientes conocimientos financieros para hacer las elecciones de inversión adecuadas.
Si después de contestar a todas estas preguntas sientes que aún tienes dudas o no te sientes seguro para tomar una decisión tan importante, quizás necesites contar con un asesor financiero que te aconseje en tu elección.
Este tipo de profesionales nos orientarán en la toma de decisiones y nos ayudarán a realizar una estrategia de inversión adaptada a nuestras necesidades.
¿Has contestado satisfactoriamente a todas estas preguntas? ¿Estás preparado para empezar a invertir?
