Además de los depósitos a plazo fijo, las acciones y los bonos son unos de los instrumentos financieros más conocidos por cualquier persona que decida invertir sus ahorros. Estos términos ya forman parte de nuestro vocabulario cotidiano, pero ¿conocemos realmente su significado, las diferencias que pueden existir entre estos productos y las tipologías de acciones que existen en el mercado?
Acción: definición
Una acción es un título que representa la propiedad de una parte del capital social de una sociedad anónima. Este título se identifica por el valor nominal del certificado de acciones, que se calcula dividiendo el capital social entre el número de acciones emitidas.
La persona que posea una sola acción se convierte en miembro de pleno derecho de la empresa y, en caso de que exista distribución de beneficios, tiene derecho a recibir dividendos.
¿Cómo se gana dinero con las acciones?
Aquellos que eligen invertir sus ahorros comprando acciones ganan dinero si la compañía está en una buena situación de mercado y su valor crece. Las acciones pueden ser compradas y vendidas libremente y en cualquier momento, siempre y cuando haya compradores y vendedores en el mercado.
Las empresas más importantes cotizan en la Bolsa de Valores, donde se encuentran la oferta y la demanda diaria de valores y donde, dependiendo de las tendencias del mercado, se establece un precio de referencia para los valores.
Acciones: tipos y diferencias
1. Acción ordinaria
Es el tipo de acción que otorga a su propietario el máximo de los derechos previstos por la ley además de:
- derecho de voto
- derecho a recurrir en contra de los presupuestos
- derecho de examen del registro de accionistas
- derecho a cobrar el dividendo
- derecho de opción
- derecho al reembolso en caso de disolución de la sociedad
- derecho de desistimiento en caso de modificación del objeto social
2. Acción preferente o privilegiada
El «privilegio» de este tipo de acciones sobre las acciones ordinarias consiste en el derecho de prioridad sobre la distribución de beneficios, que se asigna antes que en el caso de las acciones ordinarias. Sin embargo, el derecho de voto se limita a las decisiones extraordinarias.
3. Acción sin voto
Se trata de un tipo de acción que ofrece al propietario unos derechos de renta considerables, pero muy pocos derechos «administrativos» (no hay derecho de voto y el derecho de opción es limitado).
Los accionistas sin voto tienen ventajas en la distribución de beneficios y, en caso de liquidación de la sociedad, tienen derecho a prioridad en el reembolso.